Pensamiento matemático
Lo fundamental en el campo de Pensamiento matemático es promover que los alumnos usen sus propios procedimientos para resolver problemas, antes de que el maestro les enseñe los procedimientos formales que espera que dominen. Las actividades diseñadas brindan bases sólidas para que más adelante comprendan y aprovechen la utilidad de ciertos conocimientos como los algoritmos y las fórmulas.
Al realizar las actividades los niños pueden trabajar hasta cierto punto de manera autónoma. El maestro evita decirles cómo espera que resuelvan los problemas. Primero les explica de qué se trata la actividad y se asegura de que la entiendan; luego observa qué procedimientos ponen en juego y cuando terminan los invita a hablar sobre lo que hicieron.
Por ejemplo, la estrategia Cuántos cuadritos caben lleva a los alumnos a encontrar poco a poco el área de rectángulos antes de manejar la fórmula área = base por altura. Como los rectángulos son cada vez más grandes, los alumnos se cansan de contar uno por uno los cuadritos y optan por sumar los cuadros hilera por hilera o incluso por grupos de hileras para llegar al total. Cuando la mayoría de los alumnos ya dominan varios procedimientos, el maestro puede enseñarles a usar la fórmula, que entonces cobra sentido para ellos como una manera más rápida de llegar a la solución, pues simplifica las sumas reiteradas.